Los peces, anfibios y reptiles son animales conocidos como ectotermos, pues no pueden controlar activamente su temperatura interna; se regulan con la del entorno. Frente a un aumento de temperaturas causado por el cambio climático, estos organismos experimentarán un incremento de su temperatura corporal que les traerá consecuencias.
De hecho, los cambios ambientales ya les están alterando, según han demostrado varios estudios a lo largo de los últimos años. Sus tasas de crecimiento son ya más rápidas cuando las temperaturas son más altas, y sufren estrés térmico con fenómenos extremos como las olas de calor.
“Estas ponen a los animales fuera de sus preferencias térmicas, pudiendo incluso alcanzar sus límites de tolerancia a la temperatura. Cuanto más largas y frecuentes son las olas de calor, mayor es su impacto en la fisiología de los ectotermos”, explica a SINC Germán Orizaola, investigador en el Instituto Mixto de Investigación en Biodiversidad de la Universidad de Oviedo (España).
Ahora, el experto, junto a un equipo internacional de científicos, ha revisado en la literatura científica otros efectos del aumento de la temperatura en peces, anfibios y reptiles. Los resultados de este artículo de opinión, publicado en la revista Global Change Biology, sugieren que habrá un impacto del cambio climático en sus tasas de envejecimiento.