El pasado 28 de abril en el Relleno Doña Juana, hubo un deslizamiento que ocasionó que cerca de 60.000 toneladas de basura cayeran, generando un aumento en el mal olor que se causa en este espacio el cual afecta la salud de millones de bogotanos que viven cerca al vertedero.
Para verificar la emergencia se presentó la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP). La directora de la UAESP, Luz Amanda Camacho, realizó una mesa técnica en compañía de la Secretaria de Medio Ambiente, el Delegado de La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), la Superintendente de Servicios Públicos, el equipo de la interventoría y la Secretaría de Salud.
Luego de realizar dicha mesa de trabajo la UAESP le solicitó al concesionario CGR la remoción de residuos y la aplicación de Cal para poder controlar los olores y vectores. Desde el día de hoy la maquinaria se encuentra operando para garantizar que dichas labores sean realizadas en el menor tiempo posible para mitigar los daños y brindar un parte de tranquilidad a la comunidad.
Tanto la alcaldesa de Bogotá Claudia López, como la UAESP han estado realizando un constante monitoreo al relleno sanitario desde el día del deslizamiento, pues este es un tema prioritario a resolver por parte de la Alcaldía, ya que debe velar por brindar una prestación adecuada del servicio y por la salud y seguridad de todos los habitantes que se ven afectados.
Tomado de: Alcaldía Mayor de Bogotá