De acuerdo con la Secretaría de Ambiente, se espera que para este jueves las condiciones atmosféricas y climáticas empeoren en la capital por las conflagraciones. La medida de alerta amarilla por la contaminación ambiental en Bogotá se mantiene, pues las condiciones de la calidad del aire siguen siendo regulares en dos estaciones (Carvajal – Sevillana y Móvil carrera séptima), según lo anunció la Secretaría de Ambiente, a través de un comunicado. “Durante las últimas 24 horas se han presentado algunas excedencias en unas estaciones, sin llegar a niveles significativos de contaminación”, reza el comunicado, en el que se añade que “después de realizar análisis y pronósticos, se determinó mantener la alerta amarilla ambiental en toda la ciudad”.
De acuerdo con los modelamientos realizados por el equipo técnico del Distrito, se espera que para este jueves las condiciones atmosféricas y climáticas empeoren, esto por los cambios en los regímenes de vientos que facilitan el transporte de material particulado hacia la capital, producto de los incendios forestales que se presentan en los Llanos Orientales, la Orinoquía y el Valle del Magdalena. Los satélites que miden la radiación de los incendios han detectado dos grandes puntos calientes en el Magdalena Medio: el primero cerca de Barrancabermeja, y el segundo cerca de Mapiripán. Además, un incendio de grandes magnitudes en Barinas, Venezuela. Los pronósticos meteorológicos muestran que se mantendrá la nubosidad para los próximos días y las lluvias, sin embargo, se espera que las precipitaciones disminuyan su intensidad el fin de semana. En cuanto a los vientos, se prevé que se intensificarán desde el oriente en horas de la mañana, pero las probabilidades de que cambien los vientos y provengan del occidente son altas. La Alcaldía local anunció este miércoles que la medida preventiva de pico y placa extendido continuará en vigencia para vehículos, motocicletas y camiones de carga y que esto solo cambiará cuando se cumplan 48 horas sin estaciones de monitoreo que registren un aire “regular”.
Tomado de: Diario El Espectador
