En los primeros 10 días de agosto se han detectado más de 10.000 focos de incendios en el Amazonas, según un último reporte realizado por Unearthed de Greenpeace. Un aumento del 17% con respecto al año pasado. Los incendios en el Amazonas fueron noticia internacional el año pasado. Al 22 de agosto se habían registrado más de 70.000 incendios, un número récord de llamas que están arrasando con la selva.
Un nuevo reporte de Greenpeace muestra este año un escenario aún más catastrófico. La sequía, la pandemia y la vista gorda del gobierno del ultraderechista, Jair Bolsonaro, a la deforestación se convierten en una triple amenaza que podría llevar a la temporada de incendios más fuerte en la última década.
Según indican, la pérdida de selva amazónica este año (hasta julio) fue de 9.205 kilómetros cuadrados. Un tercio más que el año anterior y el equivalente a más de dos campos de fútbol arrasados por minuto.
Tan solo en los primeros diez días de agosto se identificaron 10.136 puntos de fuego en todo el bioma del Amazonas, un 17% más que los 8.669 puntos registrados el año pasado para la misma fecha. De hecho, ha habido más incendios en el bioma amazónico durante los primeros diez días de agosto que en el mismo periodo de cualquier otro año desde 2010.
Tomado de: Diario El Espectador