La producción de café ha venido decreciendo en los últimos 10 años, en el 2007 se tenías 51.000 hectáreas cultivadas y para hoy – 2018- se tienen 33.200; esto se debe a que los caficultores no cuentan con los recursos suficientes para realizar su producción, no han tecnificado sus cafetales adecuadamente y esto ocasiona plantaciones envejecidas, de baja densidad y calidad y, por ende, bajas ganancias.
Sin embargo, Cundinamarca se posiciona como el décimo productor de café a nivel nacional y para seguir escalonando, implementa programas que impulsen las prácticas agronómicas para la caficultura, apoyando a través de insumos para la fertilización de cafetales en etapa productiva y entregando sistemas de secado mecánico y solar.
En este sentido, desde el municipio de Villeta, el gobernador ratificó su apoyo y compromiso con la entrega de máquinas despulpadoras que permitan mejorar el beneficio del grano, las cuales contaron con una inversión que supera los $200 millones.
En cuanto a la producción al sector panelero, hizo entrega de equipos y elementos propios para la producción de panela y/o mieles, por un valor aproximado de $ 600 millones, los cuales mejorarán las condiciones de extracción y limpieza de jugos, además de la elaboración de panela, iniciativa que beneficiará a más de 300 productores del municipio.
Fuente: Secretaria de prensa y comunicaciones de Cundinamarca
