Desde que era una niña, Jéssica Rivas ha estado conectada con la naturaleza, gracias a que una gran parte de su infancia la pasó en el campo, en compañía de sus abuelos. Esta experiencia marcó su vida y se convirtió en una semilla que después de un tiempo brotó en forma de un proyecto con importantes impactos ambientales en la ciudad. Esta bogotana de 31 años es la creadora de Más Compost, Menos Basura, una iniciativa que nació oficialmente en 2018 y cuyo objetivo es recolectar los residuos orgánicos generados en las viviendas para aprovecharlos como abonos.
Para Jéssica, la consolidación de esta idea comenzó en su época de universidad. Ella, una mujer curiosa por los temas ambientales, aprovechaba el tiempo libre para adherirse a diferentes espacios de aprendizaje y, a la vez, compartir sus conocimientos con otras personas. Mientras estudiaba Administración Pública, aunó esfuerzos con un grupo de compañeros para crear una organización social, mediante la cual realizaba talleres enfocados en la reutilización. A través de esta iniciativa, les enseñaba a los ciudadanos a aprovechar residuos como las cajas de la leche y las llantas, entre otros.
Un tiempo después de haber terminado la universidad, surgió una convocatoria distrital en la que buscaban estrategias para que las personas pudieran gestionar adecuadamente sus residuos. Se le ocurrió que esta podría ser una buena oportunidad para seguir consolidando sus ideas por el cuidado del ambiente e ir más allá de la pedagogía para generar un proceso que repercutiera directamente en la ciudad. “Queríamos darle un enfoque diferente a la fundación, para que no se quedara solo en el taller o la caminata, sino que tomara una problemática ambiental grande y, desde la ciudadanía, se pudiera solucionar. Pensamos que podían ser los residuos orgánicos y, entonces, empezamos a investigar sobre el tema del compostaje y desarrollamos una compostera domiciliaria”, rememora Jéssica.
Tomado de: Sala de prensa CAR