Debido al incremento considerable de casos de Covid-19 en el departamento, los cuales han pasado de 283 a 841 entre el 1 y 3 de enero, el Comité Directivo de la Secretaría de Salud, adelanta seguimiento permanente a la evolución de la enfermedad y avanza en la implementación de un plan de contingencia, trabajo articulado con hospitales públicos y privados, con la finalidad de garantizar la atención oportuna a todos los pacientes.
Gilberto Álvarez, secretario de departamental de Salud, expresó que, “de acuerdo con la información disponible se espera que la severidad de los casos en la población vacunada menor de 60 años no sea muy alta. No obstante, se presume que habrá una alta demanda de consultas; por lo que debemos extremar las medidas de protección a la población mayor de 60 años y a personas con comorbilidades, como la promoción de la vacunación incluidos los refuerzos, dado que presentan mayor riesgo de contagio”.
Por otro lado, el funcionario agregó que, en el tercer año de pandemia, se registraría una gran demanda en los servicios ambulatorios de pacientes respiratorios, lo que obedecería a la capacidad de adaptación del virus, también de la afectación que causa a las personas vacunadas o las que ya hayan tenido la enfermedad, de ese modo, insistió la adecuación de zonas de atención ambulatoria a hospitales.
Además, la entidad realizó un llamado a las Entidades Promotoras de Salud (EPS), con el fin de garantizar la toma de muestras a sus usuarios y a las aseguradoras de Riesgos laborales, para que garanticen la dotación de elementos de protección personal a los colaboradores de hospitales y clínicas que tienen un amplio contacto con el virus.
Finalmente, en el plan de contingencia, se establece el incremento de tomas de muestra para reducir l impacto del virus y la Dirección de Aseguramiento la que fijará la tarifa que se reconocer por el servicio, debido a la toma de no afiliados y migrantes.
Información tomada de: Gobernación de Cundinamarca